En la región del Pacífico colombiano, el empoderamiento femenino encuentra una sólida base en la cacaocultura. Las mujeres de esta zona han redefinido su papel en la sociedad y en el campo a través de su involucramiento en todas las etapas del proceso cacaotero. Desde la planificación hasta la comercialización, estas mujeres lideran la producción de cacao, mientras preservan las arraigadas tradiciones regionales.

Un ejemplo concreto es la asociación de mujeres Asmusca, cuyo compromiso con el empoderamiento de la mujer ha sido respaldado por el programa Rutas PDET, financiado por el Fondo Europeo para la Paz. En colaboración con la Red Nacional de Agencias de Desarrollo Local de Colombia – Red Adelco, ICCO Cooperación y la Alianza de Bioversity International y el CIAT, Asmusca ha impulsado la transformación del cacao para su consumo a nivel local, departamental, nacional e internacional, siempre manteniendo un fuerte vínculo con sus raíces ancestrales.

Aunque durante años estas mujeres han trabajado incansablemente para promover el liderazgo en el distrito especial de Tumaco, su labor rara vez se reflejaba en los aspectos social, cultural y ambiental. Como respuesta a esta invisibilidad, nació la Asociación de Mujeres Canastiando, también conocida como Asmusca, una entidad que busca seguir demostrando su empoderamiento en el contexto productivo del cultivo de cacao.

El programa Rutas PDET ha sido un catalizador en este proceso, ayudando a transformar a Asmusca en una asociación que transmite valores, historias y objetivos a través de su identidad cultural. Esto ha fomentado una conexión generacional y ha motivado a la sociedad a construir una identidad colectiva que, a su vez, moldea las identidades individuales mediante el cultivo del cacao.

Elsy Quintero Benavides, una de las cultivadoras de cacao de Asmusca, expresó: «Cultivar el cacao desde nuestras raíces nos proporciona un sentido de pertenencia y significado en nuestras vidas. Nos une, nos brinda seguridad y forma parte de nuestros rituales familiares. Transmitimos el amor por el cacao, por su cultivo, alimentando nuestra conexión y eso nos reconforta».

La asociación Asmusca se enfoca en promover y fortalecer iniciativas de negocios ancestrales, incluyendo la creación de productos a base de cacao y artesanías con materiales y frutas locales. Este enfoque les ha permitido entrar en el mercado, generar mayores ingresos y mejorar la calidad de vida de 106 mujeres empoderadas, algunas de las cuales son madres cabeza de familia del consejo comunitario Bajo Mira y Frontera.

Las integrantes de Asmusca cuentan con conocimientos y experiencias en la transformación de la materia prima para crear productos finales de alta calidad de manera artesanal. También aplican prácticas de inocuidad para garantizar la excelencia del producto. Su experiencia en la participación en ferias, mercados locales y nacionales les ha permitido vender directamente al consumidor final.

En la actualidad, la asociación cuenta con un equipo directivo compuesto en su totalidad por mujeres, el 83 % de las cuales tienen formación técnica y profesional. Esto facilita la implementación de acciones alineadas con sus objetivos, como la transformación y comercialización del cacao. El programa Rutas PDET, junto con sus colaboradores, continúa trabajando para convertir estas acciones en realidades tangibles.

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